Infancia Misionera: “Uno para todos y todos para Él”

Infancia Misionera: “Uno para todos y todos para Él”

Con el comienzo del nuevo año, arranca la campaña de Infancia Misionera que se celebrará en toda España el próximo 15 de enero con el lema “Uno para todos y todos para Él”.

Aunque su lema fundacional es “los niños ayudan a los niños” y ellos también aportan su granito de arena, Infancia Misionera no es solo cosa de los más pequeños. Desde que, hace 100 años, esta iniciativa se asumiera como una Obra Pontificia, se convirtió en el cauce oficial de la Santa Sede para sostener el trabajo que la Iglesia realiza con la infancia en los territorios de misión. Las necesidades son enormes, así que también los adultos están invitados a conocer los proyectos que se llevan a cabo y colaborar.

Para ello, en la web de Obras Misionales Pontificias -disponible desde el inicio de Adviento, con materiales y actividades para colegios y parroquias- se comparten algunos de los 2.577 proyectos financiados por Infancia Misionera en 2022.

La campaña viene acompañada, además, por un vídeo protagonizado por tres niños: Harriet, de Uganda, Chan, de Tailandia, y Vikhonuo, de India. ¿Qué tienen en común? Los tres han encontrado apoyo y una familia en la Iglesia Católica. Como ellos, más de cuatro millones de niños han sido ayudados por Infancia Misionera.

En palabras de Fernando González, responsable de esta Obra en España, “conocer un poco de la vida de estos niños nos hace ponerle cara y nombre a todo lo que hace Infancia Misionera. A veces, no somos conscientes de que nuestra ayuda puede cambiar la vida de muchos niños. Cada cosa que hacemos, cada euro que donamos o cada vez que rezamos por ellos y por los misioneros, estamos mejorando las condiciones de vida de estos niños. Y todo esto es gracias a la ayuda que cada uno de nosotros damos en la jornada de Infancia Misionera. Sin duda, una oportunidad única para colaborar en mejorar el mundo”.

 

“Llevar educación y salud en medio de la selva es posible gracias a Infancia Misionera”

El pasado miércoles 11 de enero, en una rueda de prensa celebrada en la sede nacional de OMP, Jaime Palacios, misionero en Yurimaguas durante 12 años con su mujer y sus cinco hijos, explicó cómo Infancia Misionera ayuda a los niños en el vicariato apostólico de Yurimaguas, en la selva amazónica en Perú; como un ejemplo de lo que se realiza gracias a esta Obra Pontificia en los 1.118 territorios de misión.

Cuando Jaime Palacios llegó a Yurimaguas sintió que llegaba al fin del mundo, “o al inicio del mundo, según como se mire”. Este ingeniero, que con su mujer y sus cinco hijos ha entregado 12 años a la misión en Yurimaguas, da fe de que las ayudas de Infancia Misionera llegan y hacen mucho bien. En un vicariato con un tamaño superior a dos veces Cataluña, la Iglesia ha basado su acción evangelizadora en tres pilares fundamentales: la educación, la sanidad y la pastoral. Y ha sido pionera, llegando a convertirse en modelo para el Estado -que ha ido llegando a la zona mucho después-.

En cuanto a la educación, explicó cómo los misioneros desde el principio se adentraron en los caseríos a los que solo se puede llegar por río o avioneta, y fueron fundando escuelas rurales para ofrecer educación primaria. Poco a poco, se fueron creando internados para aquellos jóvenes que querían seguir sus estudios de secundaria, para evitarles viajar varios días por la selva cada día para seguir sus estudios. Según explicó, Infancia Misionera les apoya a todos cada año con lo más básico, que es la alimentación.

En cuanto a la atención sanitaria, Palacio destacó las grandes dificultades a las que se enfrentan los niños indígenas cuando se ponen enfermos, ya que para llegar a un hospital se tardan días y es muy costoso. Infancia Misionera les apoya para poder evacuarlos y trasladarlos a Lima, y allí ser acompañados y tratados. También apoyan a un hogar para discapacitados y sus familias. La atención sanitaria del vicariato ha sido especialmente necesaria durante la crisis del coronavirus. “Estas ayudas no son asistencialistas, en el caso de Yurimaguas son esencialistas”.

Y por supuesto, también han recibido ayudas para la atención pastoral de los niños en Yurimaguas. Desde allí su obispo, el misionero pasionista español Jesús María Aristín, quiso enviar un saludo en vídeo. “Gracias a Infancia Misionera nos llegan muchas ayudas. Os lo agradezco y os animo a seguir colaborando para que la Iglesia misionera pueda seguir atendiendo a miles y miles de niños en Yurimaguas”. Y en todo el mundo, ya que Yurimaguas es solo uno de los 1.118 territorios de misión que reciben el apoyo de Infancia Misionera todos los años, de forma equitativa.

 

Infancia Misionera en España

En la misma rueda de prensa, José María Calderón, director nacional de Obras Misionales Pontificias -organizadora de esta Jornada-, explicó que Infancia Misionera enseña a los niños de todo el mundo que “la Iglesia no es solo su barrio o su parroquia”, sino que es el mundo entero “y que hay muchos niños que no conocen a Jesús o viven en condiciones muy difíciles”. Calderón insistió en que no se trata de una obra en la que los ricos ayudan a los pobres, sino que se trata de “cristianos que se ayudan entre sí”. Infancia Misionera, aunque genuinamente promueve la ayuda recíproca entre los niños del mundo, también hace un llamamiento a los adultos para colaborar. “Qué bueno que podamos ayudar a que los misioneros tengan ayuda económica para sacar adelante sus proyectos con niños”.

Gracias a la generosidad de niños y mayores, cada año se apoya a más de 2.500 proyectos infantiles de educación (44%), sanidad y protección de la vida (23%) y evangelización (33%). España es el país más generoso con Infancia Misionera. Con una aportación de 2.171.773,25€, ha podido apoyar 335 proyectos en 35 países. Y lo curioso es que, entre los donantes, muchos de ellos son niños. Su aportación se suma a la de otros cientos de países, y forma un Fondo Universal de Solidaridad -que en 2022 reunió más de 12 millones de euros-, que es distribuido equitativamente entre los territorios de misión.

 

Los niños de España aprenden a ser misioneros

Infancia Misionera en España promueve a lo largo de todo el año actividades en todas las diócesis para que los niños españoles sean misioneros. Este domingo 15 de enero celebra su Jornada, y propone a los niños colorear y montar su propia “hucha del compartir”, en la que pondrán sus aportaciones para los niños del mundo. Y hasta el próximo lunes, está abierto el X Concurso nacional de dibujo de Infancia Misionera, en el que los niños pueden expresar el lema de este año “Uno para todos y todos para Él”, y podrán optar a ganar una Tablet y altavoces bluetooth.