Se clausura la VII edición del Taller de Restauración

Se clausura la VII edición del Taller de Restauración

La octava edición del Taller de Restauración fruto del convenio entre la Diputación Provincial y la Diócesis de Palencia llegó ayer a su final, con el balance esperado éxito en el resultado de las obras, implicación total de los profesionales de la restauración y satisfacción general de las dos partes que hacen posible que cada año un buen número de valiosas y muy deterioradas piezas del arte sacro de la provincia.

Con motivo de la clausura, el delegado diocesano de Patrimonio Artístico, José Luis Calvo, y del gerente del Taller, Antonio Rubio, agradecieron a los restauradores el buen resultado alcanzado, tanto por el número de piezas tratadas como por la calidad alcanzada, y elogiaron el excelente ambiente en que se han desarrollado los trabajos este año.

Cada año, y ya son ocho, una comisión mixta Obispado-Diputación analiza las necesidades entre las peticiones recibidas, y decide los trabajos que desarrollarán durante el periodo de tiempo establecido en el convenio de colaboración que suscriben ambas partes por los restauradores contratados.

El Taller que ahora finaliza, inició su actividad el pasado día 1 de marzo, participando en el mismo doce restauradores (diez mujeres y dos hombres), todos ellos con la titulación requerida, que habían sido seleccionados entre los más de veinte candidatos que concurrieron a la convocatoria, hecha pública a través de los servicios provinciales del ECYL. Diez de los restauradores tenían la especialidad en pintura y escultura y dos en artes textiles.

 

8 AÑOS DE COLABORACIÓN

Durante los seis meses de duración, doce profesionales han tratado 26 esculturas (de bulto redondo en la mayor parte y varios relieves), 8 pinturas sobre tabla, otras 4 pinturas sobre lienzo y 6 trabajos textiles, obras procedentes de prácticamente todas las comarcas palentinas.

La cifra de balance de los ocho años se ha cerrado con 344 piezas restauradas desde la primera edición que se puso en marcha en 2013, año en que comenzó la colaboración de la Diputación con el Obispado en este programa que fue pionero en la comunidad castellanoleonesa. Desde entonces han sido 150 esculturas, 116 pinturas sobre tabla, 32 pinturas sobre lienzo, 45 labores textiles y 1 pieza de orfebrería.