Resurrección y vida. Eso es Jesús. Nosotros tenemos el Espíritu del Resucitado. Lo nuestro es crear vida, ser co-creadores: de relaciones sanas, de procesos y espacios de vida, saludables, acogedores y de imaginar utopías realizables.
EVANGELIO
Había caído enfermo un tal Lázaro, natural de Betania, la aldea de María y su hermana Marta. Le mandaron recado a Jesús: “Señor, mira que tu amigo está enfermo”. Jesús, al oírlo, dijo: “Esta enfermedad no es para muerte, sino para honra de Dios, para que ella honre al Hijo de Dios... Entonces Jesús les dijo claro: “Lázaro ha muerto. Me alegro por vosotros de no haber estado allí para que tengáis fe. Ahora vamos a su casa”. Entonces Tomás, llamado el Mellizo, dijo a sus compañeros: “Vamos también nosotros a morir con él”. Cuando llegó Jesús, se encontró con que Lázaro llevaba ya cuatro días enterrado...
Cuando Marta se enteró de que llegaba Jesús, salió a recibirlo, mientras María se quedaba en la casa. Marta le dijo a Jesús: “Señor, si hubieras estado aquí no habría muerto mi hermano... Jesús le dijo: “Yo soy la resurrección y la vida: el que tiene fe en mí, aunque muera, vivirá; y todo el que está vivo y tiene fe en mí, no morirá nunca. ¿Crees esto?”. Ella le contestó: “Sí, Señor; yo creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios que tenía que venir al mundo”. Dicho esto, fue a llamar a su hermana María y le dijo en voz baja: “El Maestro está ahí y te llama”.
(Jn 11, 1-45)
La resurrección de Lázaro es el más importante de los signos que aparecen en el evangelio de Juan, tanto por su significado como por el mismo hecho realizado: la vuelta a la vida de una persona. La resurrección es señal de la presencia salvadora de Dios que se manifiesta en la actuación del Hijo encarnado.
El diálogo con Marta es el centro del relato. Jesús se revela como «la resurrección y la vida». No importa tanto el hecho de la resurrección, cuanto que a través de él Marta descubre el sentido último de la misión de Jesús: comunicar el don de Dios que es la vida definitiva para el mundo.
Y, a esta afirmación central, se une otra: «el que cree, aunque haya muerto vivirá; el que vive y cree en mí, no morirá para siempre». Jesús es la Vida. Y de esta vida participamos todos. Así lo comprendió Marta: «Yo creo que Tú eres el Mesías». Cristo recrea nuestra vida y nosotros poseemos el Espíritu del resucitado. Lo nuestro es vivir a la luz de la resurrección, “crear” vida resucitada...
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TESTIMONIO
El alumnado de Iniciativa Emprendedora de 3ºESO del colegio Marista ha acudido al centro de Cáritas de Palencia para conocer el Programa de Empleo que llevan a cabo. Es un servicio que facilita el acceso al mercado de trabajo de personas en riesgo o exclusión social, ofreciéndoles una orientación y asesoramiento laboral para una posterior inserción en puestos de trabajo o formación en empresas.
La visita tuvo diferentes partes. En primer lugar, nos explicaron en qué consiste el Programa de Empleo, cómo se estructura y cuáles son los pasos que van dando cuando una persona acude a ellos para ayuda laboral. Seguidamente, nos explicaron el proyecto de Moda Re-, con el cual colaboramos gracias a la instalación de un contenedor de ropa en el patio del colegio. En él se puede depositar cualquier tipo de prenda y en cualquier estado, ya que luego se encargan de clasificarla para reutilizarla, en las Tiendas y Entrega Social, o reciclarla. De este modo, apuestan por una economía social y circular, donde se potencia y genera una sociedad inclusiva y sostenible. Escuchamos el testimonio de un trabajador, nos contó cómo conoció Cáritas y lo que ha supuesto en su vida, tanto personal como profesional, encontrar el apoyo y ayuda de Cáritas.
Para finalizar la visita, acudimos a la tienda física de Palencia, Moda Re-, situada en la Calle Antonio Maura, 1. En ella se pueden adquirir prendas a precios muy reducidos, contribuyendo a la generación de empleo de personas en riesgo o exclusión social y apostando por su formación para una inserción laboral ordinaria.
Sin duda, os seguimos animando a colaborar en este gran proyecto.
"A orillas de otro mar, otro alfarero se retira en sus años tardíos.
Se le nublan los ojos, las manos le tiemblan, ha llegado la hora del adiós. Entonces ocurre la ceremonia de la iniciación: el alfarero viejo ofrece al alfarero joven su pieza mejor. Así manda la tradición, entre los indios del noroeste de América: el artista que se va entrega su obra maestra al artista que se inicia.
Y el alfarero joven no guarda esa vasija perfecta para contemplarla y admirarla, sino que la estrella contra el suelo, la rompe en mil pedacitos, recoge los pedacitos y los incorpora a su arcilla".
Ventanas sobre la Memoria. Eduardo Galeano.
Desde que Tú lo dijiste
con voz potente y firme,
qué pocos se han atrevido
a repetirlo –a pesar de ser creyentes-
en las múltiples ocasiones
que la vida nos ofrece.
Por eso, esta sociedad
corrompe e hiede
y está llena de muerte.
¡Lázaro, sal fuera!
Es tu palabra y buena nueva.
Dejemos de envolvernos ya
en mortajas y falsedades.
Que la verdad resplandezca;
que la sensatez y la confianza
hagan su tarea en nuestra tierra.
Respiremos tranquilos
al ver que los fantasmas
ni pesan ni toman cuerpo
y que los nudos se desatan.
¡Lázaro, sal fuera!
Es tu palabra y buena nueva.
Lo nuestro es despertar
a quienes han sido dormidos
por sus hermanos y ciudadanos
y condenados a no ser nada
-a no tener historia ni lugar-
y dejarles andar en libertad
por donde andamos nosotros,
con la misma dignidad.
¡Lo nuestro es quitar losas y mortajas!
¡Lázaro, sal fuera!
Es tu palabra y buena nueva.