Quinta jornada del Camino de Santiago de nuestros jóvenes… desde Padrón a Santiago de Compostela. El lema que les acompaña hoy es “Llamados a la misión”.
Los once discípulos se fueron a Galilea, al monte que Jesús les había indicado. Al verlo, ellos se postraron, pero algunos dudaron.
Acercándose a ellos, Jesús les dijo: «Se me ha dado todo poder en el cielo y en la tierra. Id, pues, y haced discípulos a todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado. Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el final de los tiempos».
(Mateo 28, 19-20)
¿Cómo me ha ayudado el Camino en mi camino de fe?
¿Cuál es ahora mi misión?
• Estas preguntas tienen que situarse no tanto en relación con uno mismo y sus inclinaciones, sino con los otros, frente a ellos, de manera que el discernimiento plantee la propia vida en referencia a los demás. Por eso quiero recordar cuál es la gran pregunta: «Muchas veces, en la vida, perdemos tiempo preguntándonos: “Pero, ¿quién soy yo?”. Y tú puedes preguntarte quién eres y pasar toda una vida buscando quién eres. Pero pregúntate: “¿Para quién soy yo?”». Eres para Dios, sin duda. Pero Él quiso que seas también para los demás, y puso en ti muchas cualidades, inclinaciones, dones y carismas que no son para ti, sino para otros (Christus Vivit, 286).
“ALMA MISIONERA” - Salve
Señor, toma mi vida nueva
antes de que la espera
desgaste años en mí.
Estoy dispuesto a lo que quieras,
no importa lo que sea,
Tú llámame a servir.
Llévame donde los hombres
necesiten Tus palabras
necesiten Tus ganas de vivir.
Donde falte la esperanza
donde falte la alegría
simplemente, por no saber de ti.
Te doy mi corazón sincero
para gritar sin miedo
lo hermoso que es Tu amor.
Señor, tengo alma misionera
condúceme a la tierra,
que tenga sed de Dios.
Llévame donde los hombres
necesiten Tus palabras
necesiten Tus ganas de vivir.
Donde falte la esperanza
donde falte la alegría
simplemente, por no saber de ti.
Y así, en marcha iré cantando
por pueblos predicando
tu grandeza, Señor.
Tendré mis brazos sin cansancio,
tu historia entre mis labios
y fuerza en la oración.
Llévame donde los hombres
necesiten Tus palabras
necesiten Tus ganas de vivir.
Donde falte la esperanza
donde falte la alegría
simplemente, por no saber de ti.
PROYECTO DE VIDA – PLANIFICANDO EL CAMINO
¿Dónde estoy? ¿Qué necesito saber? ¿Dónde debería llegar? Lo que Tú, Jesús, me dices…
Mi persona… sentimientos, ideas, sueños, miedos, fortalezas, debilidades…
Mis relaciones… la familia, los amigos, grupo, novio/a…
Estudios o trabajo… lo que hago ahora… lo que planifico para el futuro
Ocio y tiempo libre… aficiones, hobbies, juegos, deportes, naturaleza…
Mi fe y experiencia de Dios… oración, celebración, Eucaristía, Perdón…
Iglesia y sociedad… mi compromiso en la Iglesia y en el Mundo